Pero la lógica de un encuentro con amor y paz no se cumplió, ¿Por qué? porque cuando se disputaba el segundo tiempo salió a la luz que un hincha del club de Villa Crespo estaba presente en la platea de Morón. El mismo fue reconocido por la gente cuando aplaudió el ingreso de Lucas Sparapani en la visita mientras toda la cancha insultaba al ex volante de Morón. Pero no terminó todo ahí porque en simultaneo empezaron a estallar fuegos artificiales atrás de la popular que albergaba a los dirigentes y allegados de Atlanta. En ese momento, el hincha de Atlanta que no estaba en sus cabales producto del alcohol, esbozó la frase: "Esos fuegos los pagué yo". Entonces, algunos plateístas comenzaron a agredirlo. De tal manera, que debió ser sacado por la policía. ¿Casualidad? ¿Intencionalidad? ¿Ganas de festejar de la gente de Atlanta, porque ya están a un paso del sueño?, las respuestas no están y no se saben. Eso sí. el dato preciso que brindó la televisión es que apróximadamente habían 50 hinchas del Bohemio alrededor del estadio en una camioneta. De acuerdo a fuentes de Territorio Oeste, 7 hinchas de Atlanta se fueron antes de que empiece el encuentro y éstos, dispersos en algunos autos estacionados sobre la calle Sarmiento al 900, habrían sido los que encendieron los fuegos artificiales.
Una fracción de la hinchada de Morón que se encontraba en la popular local no se quedó de brazos cruzados y salió enseguida de sus lugares para ir en busca de aquellos responsables de que aparezcan los fuegos artificiales. Sin embargo, la policía actuó rápidamente y no dejó que los simpatizantes del Gallito logren su objetivo. No obstante, la gente salió disparada hacía la calle Almirante Brown, donde llegó la represión de parte de los efectivos policiales hacía los hinchas locales, quienes se defendieron con piedras. Como saldo de este enfrentamiento, hubo varios detenidos (no se sabe el número), un efectivo herido y tres patrulleros destrozados.
Una fracción de la hinchada de Morón que se encontraba en la popular local no se quedó de brazos cruzados y salió enseguida de sus lugares para ir en busca de aquellos responsables de que aparezcan los fuegos artificiales. Sin embargo, la policía actuó rápidamente y no dejó que los simpatizantes del Gallito logren su objetivo. No obstante, la gente salió disparada hacía la calle Almirante Brown, donde llegó la represión de parte de los efectivos policiales hacía los hinchas locales, quienes se defendieron con piedras. Como saldo de este enfrentamiento, hubo varios detenidos (no se sabe el número), un efectivo herido y tres patrulleros destrozados.
Desde la dirigencia de Atlanta se asume parte de la responsabilidad por estos simpatizantes que llegaron hasta Morón con intenciones de provocar. Se aplaude esto porque no es común en este fútbol ni en esta sociedad que alguien se haga cargo de los errores. Como contrapartida, no se imagina a la policía haciendo un meaculpa por haber permitido, por acción u omisión, la colocación de la pirotecnia en las adyacencias del estadio.
Otro punto a resaltar es que los mismos simpatizantes del Gallo cortaron los cables de la televisión para que no sigan transmitiendo el partido.
Otro punto a resaltar es que los mismos simpatizantes del Gallo cortaron los cables de la televisión para que no sigan transmitiendo el partido.
Tras el hecho bochornoso del martes por la noche, la gran pregunta es: ¿El Francisco Urbano será suspendido? no se sabe. Lo que si se sabe que lo que sucedió es algo sin explicaciones.
Daniela Cardo (dcardoterritoriooeste@gmail.com) y Lucas Gambino (lgambinoterritoriooeste@gmail.com)